Hoy he estado en un templo de Asclepio, el dios griego de la medicina, en la antigua ciudad de Priene, en la costa del mar Egeo, en la Turquía Asiática. Recordé la importancia de la medicina en esta antigua cultura griega y su profunda relación con nuestro sistema médico actual, que se bañó en las aguas del pensamiento hipocrático.
Asclepio, mas tarde en Roma llamado Escolapio, al igual que Dhanwantari para el sistema medico del Ayurveda, o Menla en el sistema tibetano, o Imhotep en el sistema egipcio, antes de ser dioses de la medicina fueron seres humanos, mortales que aprendieron las artes de la curación, se esforzaban por sanar a los seres humanos, y tenían unas técnicas muy parecidas entre ellos.
El sistema griego del que proviene nuestra medicina fue enormemente influenciado por el sistema ayurvédico indio, ambos hablan del humor viento y de los vientos internos que hacen que sabemos o enfermemos, además del humor ígneo (refiriéndose al elemento fuego que comparten ambos sistemas médicos: pitta- colérico). Los humores del Ayurveda (vata, pitta, kapha) tienen un total paralelismo en los humores del sistema griego (melancólico, sanguíneo, colérico y flemático), las reglas de los médicos indios son muy parecidas al juramento hipocráticos, y los tratados médicos griegos coinciden plenamente con los tratados clásicos ayurvédicos.
Ambos poseen el mismo sistema de estudio de los estados de la materia en la Concepción de los cinco elementos (espacio, aire, fuego, agua y tierra). Aunque no puede hablarse de una influencia fundamental entre ambas culturas, ya que su desarrollo fue distinto, si se sabe que hubo muchos contactos entre ambos países, especialmente en la expedición que hizo Alejandro Magno a India, de la cual se trajo médicos, practicantes y varios tratados.
Ambos sistemas tienen unos mismos ideales y unos mismos conceptos en la conducta y hábitos de un médico, el cual tiene que sentir un fuerte deseo de sanar a los demás, un sentimiento de compasión que sobrepasa ampliamente a su deseo de obtener beneficios económicos, y siempre sobreponer el bien del paciente frente al bien del sistema médico. Unos ideales que en muchos casos de han perdido en nuestro sistema médico actual, el cual está más interesado en la economía y beneficios de la industria farmacéutica que en la sanación verdadera y plena del paciente, aunque nos pese creerlo.
En Ayurvida Ibiza comulgamos con estos sistemas médicos ancestrales, que por ser antiquísimos no quieren decir que sean obsoletos o rudimentarios, si no que han sido comprobados y experimentados durante milenios. Comulgamos con su deseo de curar y sanar al ser humano por encima de los beneficios particulares, y deseamos continuar enseñando en nuestros cursos de formación y transmitiendo este milenario conocimiento a todos los que quieran aprender.
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Publicado Revista Aarti Noviembre 2014
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